La semana pasada tuve la oportunidad de conversar con
Blas Pérez, al final del partido que Dallas F.C. le ganó 1-0 a Colorado Rapids,
precisamente con un tanto de tiro penal del panameño.
Cuando el encuentro terminó, me dirigí al camerino del equipo tejano y le pedí permiso al jefe de prensa del club para entrevistar a Blas. La respuesta fue un sí. Obviamente, apenas lo vi, lo felicité por el gol, pero le dije que hablaríamos del Cúcuta Deportivo, equipo del cual es ídolo. Sin pensarlo dos veces, Blas sonrió y con cara de sorpresa pues no está acostumbrado a estos temas en la MLS, me dijo “claro que sí Mauricio”.
La charla arrancó, ante la mirada curiosa de los
colombianos Jair ‘El Chuiguiro’ Benítez y Andrés Manga Escobar que no entendían
por qué hablábamos del fútbol profesional de Colombia, y duro aproximadamente de
diez a quince minutos.
El placer de ser recordado
Al ser preguntado por sus memorias con el cuadro
rojinegro, Blas se reclinó hacia atrás, miró la camisa del Cúcuta que tenía en
sus manos y aseguró que era difícil resumir en pocas palabras todo lo que vivió
en su paso por la capital nortesantandereana. “Tengo muchos recuerdos,
anécdotas, lágrimas, alegrías, tengo mucho cariño por los amigos que dejé allá.
La verdad es que podríamos durar horas hablando del tema, pero voy a tratar de
ser específico”.
Sin temor a asegurarlo, y sabiendo que en el Deportivo
Cali vivió momentos de gloria, el delantero panameño dejo claro, sin dudarlo un
solo instante, que el “paso por el Cúcuta Deportivo fue lo mejor cuando estuve
en Colombia. Por eso es que recuerdo con
tanto aprecio a la afición y a la ciudad”.
Como buen hincha rojinegro, le dije que estaba entre
los máximos ídolos del equipo. Por su entrega, por su amor a la camiseta y,
sobre todo, porque nos dio algo que ningún otro 9 nos había podido dar…. un
titulo de la primera división.
“Que me tengan entre los jugadores más queridos de la
afición y que todos los hinchas digan que yo representé bien al Cúcuta
Deportivo me llena de satisfacción y felicidad. CARAJOOO… Me siento muy
contento y satisfecho de que la gente me siga apreciando allá y que tenga tanto
cariño por mí. Es mutuo porque todavía sigo recibiendo el afecto de ellos y eso
es una felicidad muy grande”.
Su alegría más allá de lo personal, es por lo que
pudieron lograr con el equipo en el aspecto grupal. “Nosotros no pensábamos
solo en el beneficio propio, teníamos un equipo unido y eso se vio reflejado en
el campo de juego. Pudimos regalarles un título antes de irnos y dar a conocer
al Cúcuta Deportivo internacionalmente y eso no tiene precio. El club era
desconocido y nosotros lo pusimos a sonar en el mundo con el gran fútbol que practicábamos
y eso quedó para siempre en la memoria de la afición y de todos nosotros”.
Aunque reconoció que tuvo momentos difíciles y
situaciones incomodas, Pérez fue sincero y afirmó que más allá de todo “siempre
dije que me iba a entregar al máximo por ganarme un puesto y a la afición, que
no era fácil, y gracias a Dios las dos cosas se pudieron dar. Dejarles ese
título y ser reconocido como una de las glorias del Cúcuta Deportivo me hacen
ser muy feliz, aun ocho años después”.
Recuerdos de un año de gloria
Blas respondió sin ningún afán cada una de las preguntas que le hice sobre el equipo Motilón
Sin duda uno de los momentos más especiales que vivió
con el cuadro motilón es la final del Campeonato del 2006. En diciembre de
dicho año, la estrella después de muchos años se le colgó al escudo rojinegro y
ese día del partido por el título en Ibagué es una de sus noches más memorables.
“La final de vuelta contra el Tolima fue un partido bien complicado. Teníamos
la ventaja del gol que obtuvimos en casa, pero allá se nos complicó un poco”.
Como si fuera ayer, el futbolista canalero hace
referencia al aliento de la barra del Cúcuta, que llenó el poco espacio que le
dieron en el estadio Manuel Murillo Toro de la capital tolimense. “Éramos un
equipo que prometía titulo y teníamos una esquinita llena de gente de Cúcuta
apoyándonos en todo momento. Nos alentaron todo el tiempo y nosotros lo
sentimos durante todo el partido”.
Como todos los hinchas rojinegros lo recordamos, el
titulo se gano con un empate a un tanto con un golazo espectacular de Macnelly
Torres, luego de una gran jugada con Blas. Con el pitido final la locura se
desató y tanto en Cúcuta, como en Ibagué, las celebraciones fueron increíbles.
Uno de las imágenes más recordadas es el círculo que
armaron los jugadores en la mitad del estadio, para agradecerle a Dios por la
victoria. “Tengo muy presente la imagen, como si hubiera sido ayer, en la que
yo estaba en la mitad de todo el grupo rezando. Nosotros siempre cantábamos con
todos los integrantes del equipo y le agradecíamos al señor. Ese día me toco a
mí y me sentí muy contento por ese título que era el segundo mío en Colombia,
pero el primero del Cúcuta en la historia. Para la ciudad fue una alegría
inmensa, era el momento de vivir, de disfrutar y ese día todos nos fuimos a
casa felices”.
Emocionado, al rememorar conmigo esas noches de
gloria, Blas se sincero y acepto que a pesar de que el futbol, tanto de clubes
como de selecciones, le ha dejado miles de vivencias en su memoria, el hecho de
“salir campeón con el Cúcuta deportivo es una alegría que nunca, jamás, por más
de que pasen los años, olvidaré. Es una imagen que siempre llevo en mi corazón
vaya a donde vaya, pues me siento un cucuteño más”.
Saludos y deseos
Antes de despedirse, agradecido por una amena charla
en la que volvió a hablar de sus momentos más memorables en el fútbol
colombiano, Blas, con mirada sincera y con sonrisa de quien tiene buenos
recuerdos, mandó un cariñoso saludo a los aficionados del equipo rojinegro. “A
toda la gente de Cúcuta y Norte de Santander gracias por el cariño que me han dado
desde que pasé por allá. Les mando besos, abrazos y mucho cariño pues los llevo
en el corazón. Ojala que la situación del equipo mejore. Aunque no lo crean,
aun lo sigo, de a poco, pero los veo. Yo vivo concentrado en lo mío pero tengo
tiempo para estar pendiente de lo que pasa por internet. Ojala que las cosas
mejoren y puedan volver a subir a la primera división para que el club vuelva a
estar en donde nosotros los dejamos y en donde merece estar un club con
semejante hinchada”.
