Mí colección

miércoles, 29 de enero de 2014

Charla de fútbol con el utilero del Cúcuta Deportivo


Nota publicada en el Diario La Opinión el domingo 14 de abril del 2013

Este es el link de la nota original en la página web de La Opinión http://laopinion.com.co/demo//index.php?option=com_content&task=view&id=417854&Itemid=94

Cúcuta tiene su Salvador
Con el ruido ensordecedor de la victoria o el silencio sepulcral de la derrota, Manuel Salvador Sánchez pasa las horas dentro del camerino del Cúcuta Deportivo. Bien sea en el estadio General Santander o en donde jueguen, este cucuteño, de 55 años de edad, es el encargado del vestuario rojinegro y es quien más conoce la intimidad del doblemente glorioso. Cuando las cosas no salen bien, él es quien aparece con un chiste, un comentario o una arenga para el equipo. Siempre con buen ánimo, Salvador es visto en el plantel como esa persona que puede ayudar a hacer amena una mala situación


Desde el 2005 cuando llegó al equipo, ‘el Chato’, como lo apoda la gente del fútbol, se encariñó con esta profesión y hoy en día se considera un hombre muy feliz y, sobretodo, muy afortunado por su trabajo. “Yo remontaba zapatos. Un día me  llamó Álvaro Vélez, presidente del equipo, a decirme que tenía un negocio para mí. Al otro día me citó en el estadio y apenas llegué me entregó la llave del camerino y me dijo: Salvador es todo suyo. Desde ese instante, mi vida cambió”. 



Con los nervios de ser primíparo en la utilería, pero con la tranquilidad de conocer el fútbol, ya que siempre jugó en el barrio, Salvador llegó a su primer día de trabajo. “Cuando entré  al camerino al otro día de ser contratado todo estaba patas arriba, muy desordenado. Fue emocionante ver las camisas del Cúcuta, yo duré mucho años soñando con tocar una de un jugador y de un momento a otro, gracias a mi Dios, tenía 22 en mis manos”.



Esos primeros días fueron increíbles, aunque rápidamente se dio cuenta cual era la realidad del equipo. Poco presupuesto, largas horas de viaje y malos resultados eran la constante en un plantel que llevaba ocho años enterrado en el infierno de la B. “Al principio era todo muy triste, el equipo estaba en segunda categoría y se pasaban momentos muy feos. Sin embargo yo le agarré amor a mi trabajo y empecé a disfrutar todo, por incomodo que fuera”. 



Entre sus primeros y más duros recuerdos se encuentra un viaje que hicieron al Valle del Cauca. Por falta de dinero, el equipo viajaba en condiciones muy precarias y cada quince días salía a recorrer el país en  incómodos y antiguos buses. “El viaje más largo fue uno a Tuluá, nos tocó sentarnos 22 horas  en un bus horrible, que se varaba a cada rato. Al otro día, sin muchas horas de sueño, estábamos jugando el partido, eran momentos difíciles”. 



Pero muy rápido, a los seis meses de haber llegado, el nuevo utilero empezó a disfrutar del renacimiento del equipo. A finales de 2005, el Cúcuta Deportivo ascendió a la primera categoría y Salvador hizo parte de ese plantel. “Cuando ganamos el ascenso estábamos felices por cambiar de categoría. Ahorita la B  ha mejorado mucho, pero en esa época era muy duro. Los viajes, los hoteles, todo era en condiciones muy precarias”.



Lo más curioso de esa experiencia fue el hecho de convertirse en el amuleto de buena suerte del cuadro motilón. Jugadores, cuerpo técnico y directivos empezaron a ver a Salvador como cábala y rápidamente se lo hicieron saber.  “Todos me decían  que yo fui el que traje la suerte luego de nueve años de malos resultados. Es que yo llegue y en poco tiempo  ganamos la B, luego la A y para completar tuvimos una gran actuación en la Copa Libertadores. El presidente también me lo dijo, fue algo muy emocionante”·

Foto Juan Pablo Cohen/La Opinión

El título de 2006 y la libertadores


Sin duda, el recuerdo más presente que tiene ‘El Chato’ en su cabeza es de la noche del 20 de diciembre de 2006. Ese miércoles, el equipo motilón logró su único título en la primera categoría del fútbol colombiano y él estuvo ahí, no se perdió ni un segundo de la celebración. “Yo lloraba sin poder parar, ese momento es lo más lindo que me ha pasado en mi vida. Cuando entré de vuelta al camerino me senté en una silla y no podía parar de llorar, eran muchos sentimientos lindos los que pasaban por mi cabeza, fue un sueño convertido en realidad”.



Recuerda como si fuera ayer el momento del gol. No solo por lo que significó, también porque Macnelly es uno de los jugadores que más quiere y  con el que aún hoy conserva una linda amistad. “Yo me acuerdo que estaba parado detrás de cientos de policías y Macnelly anotó el gol. En ese momento me sentí más grande que todos ellos y sin pensarlo me fui corriendo a la cancha, nadie me pudo detener, la felicidad me hizo salir disparado de donde estaba, fue algo muy emocionante”. 



Aparte de la satisfacción personal, Sánchez sabía que eran muchos los cucuteños que se sentían orgullosos de él. El hecho de ser un hombre trabajador, que amaba su profesión, le dio muchos amigos en el fútbol y enorgulleció a todos sus familiares. “Para mi familia era increíble verme en la televisión, también saber que iba a viajar a un torneo internacional les producía mucho orgullo. Todo lo que me pasó fue un sueño familiar que se convirtió en realidad, todos se sentían muy orgullosos de mí”. 



Después de haber obtenido su segundo título con el equipo, en la B y en la A, al Cúcuta le correspondió jugar un torneo internacional. Salvador, emocionado por una nueva experiencia alistó sus maletas y, con nervios por salir del país por primera vez, se embarcó rumbo a varios lugares donde jugaría el equipo. “Recuerdo los primeros viajes en Copa Libertadores. 



Para mí era la primera vez y yo sentía algo de susto. Menos mal Robinson Zapata y Rubén Bustos ya habían viajado en Copa con el América y ellos me ayudaron con todo. Recuerdo mi tensión en inmigración, pues nos demoraron mucho y yo pensaba que nos iban a robar el equipaje, fue un susto muy grande”. 



Uno de sus mejores recuerdos de esta experiencia fue en Brasil, cuando enfrentaron al Santos. “El utilero de el equipo brasileño me llevó una tula gigante y me dijo vamos a cambiar. Yo le dije que nosotros no teníamos tantas cosas para regalar y él me dijo que no importaba. Me puso una tula en el piso y me dijo que me podía llevar lo que quisiera. Esos recuerdos todavía los guardo”.


Lo que le ha dejado el fútbol


Luego de más de ocho años en esta profesión, en la que se encarga de toda la indumentaria del equipo y de los caprichos de los jugadores, Salvador Sánchez sigue siendo feliz con lo que hace y disfruta cada minuto de su trabajo. En ese tiempo, son muchas las experiencias y vivencias que ha tenido y son demasiados los amigos que le han quedado en el deporte más popular del planeta. “Yo he tenido amistad con  muchos jugadores, pero a mí el 2006 me marcó. Robinson Zapata, Blas Pérez, Lin Carlos Henry y Macnelly Torres son amigos que me quedaron para toda la vida, todavía hablamos seguido y cuando podemos nos vemos”. 



Dos personas han marcado su vida. Jorge Luis Pinto, entrenador del equipo durante varios años, y Macnelly Torres, volante del cuadro motilón, son esos seres humanos a los que nunca olvidará y a los que considera mucho más que amigos del deporte. “Pinto es como mi segundo padre, el me aconseja siempre y me estima mucho, tenemos una relación muy bonita. ‘Mac’ es un hombre inigualable. Recuerdo que cuando duramos cinco meses sin recibir el sueldo él me ayudaba. Ellos me quieren mucho a mí y a mi familia”. 



Sin duda, son muchas las experiencias que ha tenido. Pero hay dos que lo marcaron. 



La primera, sucedió el único día que cometió su más grande error siendo utilero del equipo. “Mi peor momento fue un día que dejé los buzos de arquero en el hotel. Nosotros llegamos al Campín y teníamos que jugar muy pronto y no tenía las cosas listas. El técnico era Pinto y yo no sabía cómo decirle pues él tiene un temperamento muy fuerte. Menos mal ese día Santiago Santos me ayudó y fue en un carro a recogerlos”. 



La segunda, ocurrió en el avión que llevaba al equipo a Ibagué, para jugar la final contra Tolima. Es una historia que no olvida, pues en ese momento le parecía increíble que un técnico le pidiera algo así. “Cuando íbamos viajando, el profesor Pinto me llamó en el avión y me dijo: Salvador cada vez que pueda se tienen que meter a la cancha para parar el partido. Yo no quise abandonar la puerta entonces fue el burrito el encargado de hacerlo, él se metió varias veces hasta que la policía se lo llevo. Ahí me di cuenta que el fútbol era mucho más que once contra once”.



Salvador sigue disfrutando de su trabajo y es uno de los que más tiempo lleva en el equipo. Ya son ocho años en este puesto  y, por lo que parece, serán muchos más. “Yo le tengo mucho amor a esta profesión, soy feliz y con esto puedo mantener a mi familia. A pesar de que este es  un arte que muchos no valoran, para mí el utilero es pieza fundamental dentro de un equipo de fútbol. Aquí seguiré siendo feliz mientras me lo permitan, nunca he pensado en tirar la toalla. Desde que en el equipo quieran, habrá Salvador para rato”.

Recuerdos de la Copa Libertadores de América

A proposito del arranque de la Copa Libertadores de América, ayer, se me ocurrió hacer este post con algunos recuerdos que tengo del torneo de clubes más importante del continente. 
La verdad, aunque no discuto a quienes dicen que la Liga de Campeones de Europa es el mejor torneo de clubes del mundo, para mí la Libertadores es un campeonato tremendo. 

La historia, los equipos coperos, la garra suramericana y las eternas rivalidades, hacen de esta competencia un manjar para quienes nos sentamos año tras año en busca del mejor banquete futbolero de la zona.

Como colombiano, tengo muchos recuerdos de esta Copa. Aunque no recuerdo la  que ganó Nacional en 1989, por tener solo tres años, ni la obtenida por el Once Caldas en 2004, porque vivía en Canadá y no la pude ver, tengo gratas memorias de las ediciones de 1995 (Nacional subcampeon luego de perder con Gremio de Porto Alegre), 1996 (América de Cali subcampeón al perder con River Plate), 1999 (Cali subcampeon al perder con Palmeiras), 2003 (América de Cali e Independiente Medellín semifinalistas) y 2007 (Cúcuta semifinalista). 

Sin duda, el mejor capitulo que tengo grabado en la memoria de dicha competencia es la participación del 'Doblemente Glorioso' Cúcuta Deportivo, que en su primera Copa llegó a meterse entre los cuatro mejores del continente. Recuerdo como si fuera ayer el día que quedamos eliminados. Esa noche, la terminé quemando afiches de Boca y con un dolor en el alma tremendo. Hoy en día, me arrepiento pues extraño esos afiche. Pero el sentimiento de hincha es algo que no se puede controlar. 

Aparte de las memorias, tengo estos recuerdos físicos del torneo suramericano. Todos unas reliquias. 

Cortuluá 2002
Esta camisa fue con la que Cortuluá enfrentó a River Plate la edición de este año. Su historia es bastante particular, ya que el patrocinio de corona resultó ser una estafa. La anécdota completa de esta prenda puede leerla en el post Camisas del fútbol colombiano. Según me han dicho, este número lo usaba Rubiel Quintana. 

Cúcuta Deportivo 2007
Aunque Joe Luis Raguá fue suplente en Montevideo, y no jugó, esta prenda, que fue la que llevó para ese partido, la guardo con gran cariño pues es del equipo de mi alma y además es manga larga, algo poco común en las camisas del equipo rojinegro. 

 Cúcuta Deportivo 2007
Blas es de esos ídolos que no se olvidan. Esta prenda, fue con la que el panameño jugó en Porto Alegre, frente a Gremio, en aquel recordado partido en el que el Cúcuta empató 0-0 con el cuadro brasileño. 

Cúcuta Deportivo 2007
Camisetototota. Así es. Esta prenda de Rubén Darío Bustos ha hecho que más de una vez se me abran las agallas, pues me han ofrecido mucha plata por ella. Incluso, el mismo jugador me ofreció una gran suma de dinero, que por supuesto, y por el amor al equipo, rechacé. Fue con la que jugó frente a Toluca, en México, en donde el cuadro motilón cayó derrotado 2-0 a mano de los mexicanos pero avanzó a los cuartos de final de la competencia debido al 5-1 en la ida jugada en el estadio General Santander. 

Toluca 2007
Esta camisa se comió cinco goles. Carlos Morales, titular en dicho partido, que fue el primero en el remodelado estadio General Santander, la usó esa terrible noche en la que el once mexicano se fue goleado. Debo decir que ese día estuve en el estadio. Me pegué, por amor al equipo, un viaje en bus por más de 15 horas para ver el partido y apenas salí me volví a montar al bus. Los cinco goles pagaron cualquier esfuerzo. Y eso que empezamos perdiendo con gol de Ignacio 'Nacho' Scocco. 

Nacional de Montevideo 2007
Aunque Marcelo Tejera, dueño de esta prenda, no jugó contra el Cúcuta en el juego de ida de los cuartos de final de la Copa, con esta camisa fue al banco de suplentes. 

Boca Juniors 2007
Este fue un regalo que me hizo Salvador Sánchez, utilero del Cúcuta, el día que fui a hacerle una entrevista para el diario La Opinión de Cúcuta. Fue con la que Jesús Dátolo calentó la banca en la Bombonera, en donde luego de caer 3-0 frente a Boca Juniors, terminaron las ilusiones del equipo rojinegro en la Libertadores. 


 Santos F.C. 2008
A pesar de que Alemao era muy joven en esa época y no era titular, con esta prenda estuvo a la espera de poder ingresar al campo de juego en el General Santander. 


Caracas 2009
Las camisas de los jugadores de Norte de Santander me enloquecen. Esta es una de ellas. La usó Jaime Bustamante en la edición 50 de la Copa Santander Libertadores. Lo mejor, es el parche conmemorativo por el aniversario del torneo. Y claro, la propaganda de Polar y Diablitos Under Wood, clásicos para cualquier habitante de la frontera colombo-venezolana. 

Jorge Wilstermann 2011
Mi amigo Luis 'Morumbí' Zapata tuvo este detallazo conmigo. Un día, me hizo llegar a mi casa esta prenda, que fue con la que jugó la Copa del 2011 con el equipo boliviano. Fue imposible encontrar foto, pero seguro algún día la conseguiré con 'Lucho'. Además de todo, está firmada con dedicatoria especial. 

Cúcuta Deportivo (Hincha)
No la podía dejar por fuera. Es, junto a la Adidas de 2011 de Colombia, la única que uso. Esta me la pongo cada vez que viajo al exterior y tengo fotos increíbles en algunos lugares del mundo con la rojinegra. Además, la use cada una de las noches en que el Cúcuta Deportivo jugó en la edición del 2007. Esta si es la prenda del recuerdo. 

martes, 28 de enero de 2014

No hay que prender las alarmas

Por: Mauricio Jaramillo Mutis

Foto tomada de Internet (Colprensa)

Aunque vi el partido por internet, con muy mala calidad y con la señal intermitente, me atreveré a hacer un balance del debut en la B del Cúcuta Deportivo, que cayó derrotado 3-1 frente al Unión Magdalena. 

Lo primero que hay que decir, para empezar, es que este es un equipo nuevo, con pocos entrenamientos, por lo que no se le puede juzgar y acribillar despiadadamente por el resultado adverso. 

Pero hay que ser realistas. Más allá de ser el primer juego, en el que no se pueden sacar conclusiones definitivas, es preciso asegurar que el inicio de campeonato no fue bueno y que son más las cosas malas que se le vieron al cuadro de Héctor Estrada, que las cosas positivas. 

Pero por esto, no se pueden prender las alarmas como lo están haciendo algunos fanáticos del equipo motilón. Ya hay algunos destrozando al plantel y asegurando que con este grupo no se puede ascender. Esos, son los mismos que hace días decían que sería fácil regresar a la primera división. Seguro, gente que poco ve fútbol y que le gusta hablar por hablar. 

Para mí, lo preocupante, más allá de todo lo que hay que mejorar, fue la defensa y la actitud de algunos jugadores. No se puede encajar un gol a los cuatro minutos, porque así cualquier libreto cambia. Eso pasa, es cierto, pero el problema fue que desde el arranque el Cúcuta le dejó saber al equipo samario que entró desconcentrado y eso pasó factura. 

La zaga cucuteña se mostró terriblemente pérdida y dejó ver que todavía faltan horas de trabajo. El tercer gol, es un gol que no le pueden hacer a un equipo serio, que aspira ascender a la primera división. Lo mismo el primero. Dando esas ventajas, nos repetirán la dosis en todos los estadios de la B, de eso no hay duda. 

En fin. Aunque quedé decepcionado, como todos los hinchas rojinegros, creo que fue un partido normal, como cualquier otro, y por esto no hay que preocuparse en exceso ni desarropar a un grupo que lo que necesita es el apoyo de todos. 

Tengamos paciencia, acompañemos al equipo y cuando vayan más fechas empecemos a juzgar. Por ahora, no vale la pena, aunque hay que ser realistas y aceptar que el debut fue un desastre. 


Ahora, solo le queda al cuerpo técnico y a los jugadores planear el próximo partido, frente al América de Cali, y a los hinchas prepararse para acompañar al equipo y mostrarle a los jugadores que más allá de las condiciones, el apoyo por el ‘doblemente glorioso’ es incondicional. 

La nueva camiseta
Foto tomada del Facebook de Rafael Alvarado, parte de la familia dueña de la marca

Mientras Macron, marca que se dice vestirá al Cúcuta Deportivo, saca su nuevo diseño, Kiwi Sport hizo la camiseta del debut en la B.

Esta marca local, que siempre estuvo ahí cuando el equipo lo ha necesitado, hizo un diseño diferente de lo común y nos sorprendió a todos con esa banda cruzada con los colores tradicionales del club.

Aunque no me encantó, me parece chevere el hecho de salir de lo clásico, pues en un mundo como el de hoy, en el que se necesita vender camisetas, esto llama la atención de la gente. Además, para mí como coleccionista es un placer ver diseños raros, ya que estos hacen de la prenda mucho mejor para coleccionar y guardar en un futuro.

¿Qué tal esta perla?

Antes de irme, comparto con ustedes la felicidad de tener una pieza de colección más del equipo. Aquí les dejo la última adquisición. Una reliquia, ¿no?




lunes, 27 de enero de 2014

Selecciones Nacionales

Colombia 1998
Aunque la tuve en su momento, la regalé. Esta, me la cedió mi hermano mayor, que siempre guardó las camisetas que tuvo. Todas, cayeron en mis manos.

Colombia 1998 Faustino Asprilla
La historia de esta camisa está en el post zona de cracks. Sin duda, una de las más ásperas de la colección. Es una de las que llevó el Tino Asprilla al mundial de Francia 98. 

 Colombia 2002
Esta es otras de las que me regaló mi hermano mayor. Y claro, también la tuve y también la regalé como muchas otras. 

Colombia 2005
Llegando de Miami, en el 2013, había una selección sub-15 de Colombia en el aeropuerto El Dorado. Ese día, le hice una entrevista al entrenador del plantel. Al final de la charla, le dije que si me podía regalar una camisa del equipo y él me dijo que no tenían, pues no les daban sino una por jugador. Pero él, muy querido, me dijo que llevaba esta camisa del 2005 puesta y que me la podía regalar. Se la quitó y me la dio para mi colección. 

Colombia 2005
Increíblemente, de esta camisa no conseguí foto en uso. Un día, un amigo de mi hermana la llamó y le dijo que tenía dos camisas para regalarme. Una, era una de Ronaldinho, del Barcelona, y la otra es esta. 

 Colombia 2007
La historia de esta camisa está en el post Camisetas firmadas. Me la regaló una prima que la recibió de los jugadores en un viaje en avión por algún lado del mundo. 

Colombia 2009
De esta camisa nunca he podido averiguar quién la usó. Solo sé, que es un jugador de las categorías inferiores del América de Cali o del Deportivo Cali de esos años. Me la regaló un amigo que hice durante el mundial Sub-20 Colombia 2011 en la capital del Valle del Cauca. 

Colombia 2011
Cuando Adidas lanzó esta camisa de Colombia, no dudé en comprarla. La verdad, es uno de los diseños que más me gusta de la selección nacional. La conseguí en Adidas, por un precio de 140.000 pesos, y fue la primera y única, hasta el momento, que tengo manga larga. Es, junto a la camisa del Cúcuta de la Copa Libertadores del 2007, la única que uso.

Colombia 2011 Angelica Hernández
Mi amiga Isabel Franco, que trabajó con la selección femenina, tenía varias camisas de dicho equipo. Durante varios meses, negociamos una de estas y al final esta fue la que me regaló. Es muy especial pues es la única prenda que tengo del fútbol femenino. 

Argentina 2010
La historia de esta prenda está en el post Zona de Cracks. La conseguí en TJ Maxx, almacén donde rematan prendas de temporadas anteriores, en donde he conseguido varias de las camisas que tengo. El número, que terminó siendo más nuevo que la camisa, lo conseguí en Soccer Stop, tienda en Denver donde compro camisas. 

Argentina 2010
En aquella negociación que ya les he contado con el utilero del Cúcuta Deportivo, me mostró esta prenda. Es de Nicolás Pinto, jugador de las juveniles de Boca Juniors. Cuando la vi, me gustó porque es tecnología techfit y es la única que tengo así, por eso decidí adquirirla. Según me dijo quien me la dio, fue usada en un suramericano Sub-17 en la ciudad de Medellín.

Brasil 2006
Esta camisa es la más barata de toda la colección. La conseguí un día que fui, en Denver, a un almacén donde venden solo ropa de segunda. El precio, aunque suena ridículo, fue de 2 dólares, al cambio más o menos unos 2.000 pesos. Seguro el que la llevó, no sabía la prenda que tenía en las manos. 

Chile 2011 Claudio Bravo 
La historia de esta camisa está en el post de camisetas firmadas. La conseguí en la tienda Onze Deportes, de mi amigo Carlos Estupiñán, en la calle 17 con carrera 6ta en Bogotá. Me la firmó Bravo en Barranquilla, un día antes del partido Colombia 3 Chile 3 de las eliminatorias al Mundial Brasil 2014. 

Venezuela 2006
Esta camisa me la regaló Antonio Salguero, un amigo cucuteño que me regaló unas ocho camisetas de la época. Es especial, pues fue la primera camisa Adidas que usó Venezuela. 

Estados Unidos 2010 
Estados Unidos siempre ha tenido camisas que me han llamado la atención. Este modelo, que conseguí en Ross Dress For Less, almacén donde rematan prendas de temporadas anteriores, me tomó tiempo tenerla. Primero compré la roja, luego la blanca y finalmente me quedé con esta azul, que me parece la más clásica y bonita de ese momento. Me costó 19,99 dólares, al cambio unos 40.000 pesos. 

Canadá 2011 Sergio Camargo
Esta es una de las prendas más especiales de selecciones que tengo en la colección. Aparte de ser oficial del Mundial Sub-17 de México 2011, es de un cucuteño que juega fútbol profesional en Canadá. Se llama Sergio Camargo Peñaranda y aunque no jugó mucho durante el mundial, me la hizo llegar a mi casa. No hay foto de esta en uso, pues su debut en el mundial lo hizo con la camiseta roja del equipo canadiense. Tiene los parches oficiales del mundial de ese año y el del fair play de la Fifa. 

México entrenamiento 2010
Esta camisa de entrenamiento me la regaló un amigo de mi hermano, que la tenía en su casa y no la usaba. Cuando me la dio, me dijo "estará mejor en sus manos". Sin duda, así es y aquí está. 

 Panamá 2006
Cecilia Gamboa, alias 'La Chechi', periodista deportiva cucuteña, me ha ayudado a conseguir grandes camisas para la colección. Esta, se la regaló hace unos años Blas Pérez, que por ese entonces era figura del Cúcuta Deportivo. El año pasado, en un negocio que hicimos, la prenda sirvió como parte de pago y los dos quedamos felices. 

 España 2010
Desde que España quedó campeona del mundo, me propuse a conseguir esta camisa. Un día, me llegó una prenda del Barcelona, que no tenía. Aunque no la quería cambiar, ya tengo varias del Barca, por lo que la saqué para obtener otra. En una visita a Onze Deportes, en Bogotá, se la mostré a Carlos Estupiñán, el dueño del negocio, y a él le gusto pues no la tenía en su colección. Al final, hicimos el cambio y yo me quedé con esta. Sin duda, una camisetota de colección, más contando con que siempre me gustó el equipo español. 

España 2012
Un primo, que siempre me ayuda con las camisetas, me llamó un día y me dijo que estaba en Adidas y que había una camisa de España en 30.000 pesos. Sin verla, no dudé y le dije que me la comprara. Para mi sorpresa, pues pensé que iba a ser una de entrenamiento o alguna prenda vieja, era esta camisa con la que jugaron la Eurocopa del 2012, que terminarían ganando. 

Italia 1998
Mi mejor amigo, Pipe Villamizar, tenía unas camisetas increíbles. Entre esas, varias del Mundial de Francia 98. Después de mucho rogarle, se decidió a dármelas y me hizo muy feliz. Me gusta esta camisa italiana pues es con el escudo viejo y además es muy clásica. 

Italia 2011
Esta es otra de esas prendas que, buscando minuciosamente, conseguí en Ross Dress For Less. Lo más increíble de esta camisa fue su precio. Pague 12,99 dólares, que al cambio son alrededor de 25.000 pesos. 

Francia 2002
Como olvidar esta camisa. Fue de las primeras que pude comprar con mi plata. Fue en El Cairo, Egipto, en el 2002. La usé mucho tiempo y hoy en día, la tengo como una de las prendas que más aprecio de mi colección. Es una belleza por su diseño y sus colores. Es de las únicas camisas que he comprado recién salidas, pues normalmente, desde que empecé a coleccionar, las compro cuando ya son de temporadas anteriores. 

Francia 2011
En los outlets de Nike, siempre consigo camisas a buen precio. Esta, la compre por apenas 29,99 dólares, al cambio unos 60.000 pesos colombianos. Me gusta por ser un diseño clásico y elegante, algo que siempre ha caracterizado a los franceses. Esta específicamente la compre en los outlets de Castle Rock, en Colorado. 

Inglaterra 1998
Increíblemente, no he logrado conseguir una foto en uso de esta belleza de camiseta. Esta se la regalaron a mi hermano menor hace más de una década y él me la pasó a mí. Si alguien ha visto o tiene una foto de esta prenda, me la puede enviar a @mauricio22jara en twitter o al correo boby22j@gmail.com

Inglaterra Sub-20 2011 Blair Adams
Los ingleses siempre tuvieron diseños muy cheveres en su camiseta de la selección nacional. Acá, una prueba de ellos. Me encanta, entre otras, por tener el estampado oficial del torneo debajo del escudo. No todas las selecciones se fijan en estos detalles. Para conseguirla, debí hacer un triple trueque. Primero, conseguí una camisa de juego de Nueva Zelanda, del Mundial, que todo el mundo quería. Esa, se la cambié a un amigo por una de la selección Colombia. La de la tricolor, se la ofrecí al attaché de Inglaterra, que estaba buscando desesperadamente la de la selección nacional. Así fue como finalmente la obtuve y no la cambio por nada. Este jugador, en unos años puede llegar al top del fútbol mundial, esperemos que así sea. 

Alemania 2012
Desde que vi que Alemania había lanzado esta camisa retro, siempre la quise. Un día, mi primo, el que siempre me ayuda con esto, me dijo que estaba en 20.000 pesos en Adidas en Unicentro, en una promoción que duraba solo unas horas. Obviamente, le dije que de una y acá está. Es una de las camisas más clásicas y lindas que he visto en los últimos años en cuanto a selecciones se refiere. 


Portugal Sub-20 2011 Pelé
La historia de esta camiseta está en el post camisetas firmadas. Es la única de todas, que me han regalado justo al terminar un partido. Fue en el enfrentamiento entre Portugal y Nueva Zelanda, en Cali, en el Mundial Sub-20 Colombia 2011. 

Holanda 1998
Las camisas de Holanda siempre me gustaron. Este modelo me lo regaló mi mejor amigo, en una lote de camisetas que me pasó hace algunos años. Debo decir que me han llegado todo tipo de propuestas por esta prenda, que gusta demasiado, pero que no cambio por nada. 

Turquía 2010
Esta fue otra de las que conseguí en el remate de Soccer Stop en Denver, por 20 dólares. Siempre me gustaron las camisas de Turquía y esta en especial me fascina por la bandera. Es un diseño muy clásico y elegante, como deberían ser todos los de selecciones nacionales. 

Croacia 2010
Esta fue otra de las que conseguí en los Outlets de Castle Rock, en Colorado. En Nike, por lo general entro y salgo con algo. Siempre me gustaron las camisas de Croacia y cuando la vi, no lo dudé. Además de lo linda, por su precio, 29,99 dólares, unos 60.000 pesos colombianos. 

Suiza 2011
Esta es otra de esas prendas que encontré luego de buscar en muchos Ross Dress For Less. Me costó 19,99 dólares, como casi todas. Es la camisa con la que jugaban ese año, aunque esta es de entrenamiento o de algún amistoso, pues trae el patrocinio delCredit Suisse. 

Egipto Sub-20 2011
En un viaje que hice a Egipto, me di cuenta que allá todo funciona con enredos y engaños, es algo impresionante. Con esta camisa, lo volví a comprobar. Cuando la selección africana llegó a Bogotá, para prepararse para el Mundial Sub-20 Colombia 2011, fui a varios entrenamientos y me hice amigo del manager general del equipo. Él, muy querido, me prometió una camiseta y me dijo que sería de las de juego. Luego de ir 4 días seguidos, pues me la prometía día tras día, me cansé y no volví. Pero ahí él me volvió a llamar y me dijo que pasara por el hotel que ya me la tenía.

Fui feliz por mi camisa y de una forma muy misteriosa el pana me la dio. Me la entregó, a escondidas, en el cuarto del lugar donde se hospedaban. Estaba en una bolsa negra y me dijo que no la fuera a abrir en el hotel pues no quería problemas. Cuando llegué a la casa, la abrí y me encontré con este pedazo de camiseta. Vieja, rota, usada, con el Puma a medias. Y lo peor, en la parte de atrás, el número lo habían recortado para entrenar con más comodidad. Aunque le agradecí, me sentí enredado una vez más por un egipcio. Me dio una camisa que ya estaba lista para regalar, por su estado. Pero acá está y por la historia la considero tremenda prenda en la colección. 

Sudafrica 2010
En una liquidación que hicieron en Denver, en la tienda Soccer Stop, conseguí esta y muchas otras camisas por 20 dólares. Desde que la vi me gustó, pues fue con la que Sudáfrica enfrentó a Colombia antes del Mundial 2010. 

Australia Sub-20 2011
Esta fue una de las prendas que me quedó del Sub-20 Colombia 2011. La conseguí con el Attaché de Australia, que me la cambió por una camisa de entrenamiento de Nueva Zelanda. Algo que llama la atención es el tamaño, en realidad, parece más una sábana que una camisa de fútbol. EL arquero australiano era gigante, como se puede ver con su camisa.

Nueva Zelanda
Las historias de estas tres camisas, del Mundial Sub-20 Colombia 2011, están en el post de camisetas firmadas. 

Nueva Zelanda Sub-20 2011 Stefan Marinovic

Nueva Zelanda Sub-20 2011 Dakota Lucas

Nueva Zelanda Sub-20 2011